Este título además de ser llamativo, es real, existen varias enfermedades que las pueden curar la moringa, por eso consumir este nuevo superalimento es todo un atractivo actualmente en el mundo entero.
Uno de los aspectos interesantes que tiene esta planta es que sus propiedades medicinales se expanden por todas sus partes bien sean hojas, flores, fruta y hasta la corteza, dejando ciertos valores que son importantes para decidir su consumo.
Algunos hablan que esta planta cura hasta 300 enfermedades las cuales sin duda, algunas están comprobadas y otras pueden ser parte de un mito.
Algunas de las enfermedades que cura la moringa
La moringa según algunos expertos tiene la propiedad de combatir algunos tipos de cáncer, todo gracias a que contiene en su estructura isotiocianato de bencilo, el cual está confirmado que ayuda a fortalecer nuestras células y sobre todo le da fortaleza al cuerpo para soportar las consecuencias que ocasiona la quimioterapia.
El consumo de su raíz puede ser muy beneficioso para quitar el dolor de cabeza, mejor que cualquier analgésico, expertos aseguran que al mezclar un jugo obtenido de estas mismas raíces con un toque de azúcar natural elimina inmediatamente cualquier dolor de este tipo.
Al moler la moringa conseguimos que tenga la capacidad de reducir el nivel de grasa en nuestra sangre, un remedio ideal para aquellas personas que sufren de colesterol alto.
Enfermedades comunes
Otras enfermedades comunes donde la moringa tiene la capacidad de reducir su efecto, combatirla y hasta curarlas son la hepatitis, el asma, hasta la propia tos, además puede tener efectos positivos sobre la tuberculosis y la menopausia.
El contenido de Vitamina A que posee es esencial para la protección de nuestros ojos, como conjuntivitis, orzuelos y también los denominados ojos rojos. Esta misma vitamina puede tener acciones adicionales en padecimientos como dolencias del corazón y algunos malestares digestivos.
Por su alto contenido de calcio es ideal para el consumo de veganos, al consumir una cucharada de esta estamos obteniendo una décima parte del requerimiento total de calcio de nuestro organismo. Por otro lado logra combinar dos excelentes minerales, como son el propio calcio más el magnesio, aportando una gran capacidad para darle fortaleza a nuestros huesos, ayudando simultáneamente a equilibrar nuestro sistema nervioso y a fortalecer el tono muscular.
Otros usos de la moringa
Nos brinda mucha energía su alto contenido en vitamina B1, también contiene vitamina E aunque solamente se obtiene en buena cantidad de sus semillas y de los aceites vegetales que se fabrica.
Por su alto contenido en glucosinolatos esta maravillosa planta de moringa tiene un efecto importante al activar el metabolismo, lo cual incide en su incidencia en las personas que quieren bajar de peso.
Este superalimento tiene alta capacidad para combatir el envejecimiento, sobre todo en las cremas que están elaboradas con un extracto concentrado de esta planta, además de que un tratamiento continuo con la misma ayuda a suavizar y mejorar la calidad de la piel.
Las hojas de moringa son utilizadas en muchos casos un laxante y purgante, sobre todo si se tiene un estreñimiento muy severo. Adicionalmente quienes están realizando una dieta estricta pueden utilizar este superalimento no solamente como un colaborador sino también como un suplemento nutricional.
El jugo que podemos obtener de sus hojas se puede utilizar para curar algunos tipos de heridas y hasta cicatrizarlas, lo cual demuestra su alto grado antiséptico.
No podemos esperar menos de esta planta que tiene un contenido tan valioso en cada una de sus partes, su aporte nutricional y energético puede ser determinante no solo en enfermedades sino en la activación de nuestro cuerpo para el día a día.